
una mañana, o una tarde quizá,
las hadas recogieron sus cosas
y volaron muy lejos, y más allá
no estaban enfadadas, tristes, aburridas, desanimadas ni cansadas...
no habían dejado de amar ni pretendían escapar para no volver más
tan solo querían volar un poco más arriba...
y hacer una travesura
tan solo querían... jugar y ser ellas mismas
algún día regresarán...
ahora... deben empezar a vivir